Si bien la sola mención de la palabra cannabis muchas veces evoca imágenes relacionadas con su uso recreativo, que aquí en Uruguay es legal, en YVY siempre nos hemos abocado a su producción para uso medicinal.
A pesar de que sus efectos benéficos en el tratamiento de múltiples afecciones son conocidos, no siempre es fácil acceder al cannabis medicinal ni a los cannabinoides que se producen a partir de la planta. Entre estas afecciones que podemos tratar con cannabis se encuentran la epilepsia, enfermedad de Parkinson, enfermedad de Alzheimer, esclerosis múltiple, síndrome de Tourette, autismo, psoriasis, síndrome de estrés postraumático, lupus y varias enfermedades autoinmunes más.
Tal vez ya sepas que una de las razones fundamentales que llevaron a Kevin Nafte y Andrea Kruchik a fundar YVY fue justamente un tema médico. Kevin sufre artritis psoriásica, la cual se caracteriza por generar dolor articular, hinchazón y rigidez. Luego de intentar varias terapias sin buenos resultados, Kevin decidió explorar opciones basadas en cannabis medicinal. El tratamiento con cannabinoides le ayudó muchísimo con esta afección y lo impulsó a emprender en este nicho de mercado.
Entre las más destacadas aplicaciones médicas del cannabis se encuentra, además, el alivio de los efectos secundarios de los tratamientos contra el cáncer, como la quimioterapia. El uso de cannabis medicinal reduce las náuseas y vómitos, estimula el apetito, y alivia el dolor. Estos efectos, en conjunto, se traducen en una mejoría en el estado general del paciente, además de su estado de ánimo.
Otra aplicación del cannabis medicinal largamente documentada (desde la década de 1970) es el uso de CBD en el tratamiento de la epilepsia, como anticonvulsionante, especialmente en casos de epilepsia refractaria (o resistente a otros tratamientos). De hecho, el 25 de junio de 2018 la Food and Drugs Administration de los Estados Unidos aprobó el uso de un medicamento, cuyo ingrediente activo es derivado del cannabis, para el tratamiento de esta enfermedad.
Y queda mucho por investigar. Por ejemplo, en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson todavía no se ha encontrado cuál de los más de 100 cannabinoides conocidos es el más adecuado como neuroprotector, pero ya se han estudiado las mejoras en los síntomas motores que experimentan los pacientes tratados con derivados del cannabis.
De similar forma, en el tratamiento de la artritis reumatoidea, es destacable el efecto analgésico de los cannabinoides y, tal como sucede en otras enfermedades autoinmunes, su efecto como modulador del sistema inmunitario es sumamente benéfica.
Porque creemos en el poder medicinal de esta fabulosa planta es que hemos sido impulsores aquí en Uruguay de la "ley integral para el fomento y acceso al cannabis medicinal y terapéutico", desde la Cámara de Empresas de Cannabis Medicinal. No se puede investigar aquello que no puede conseguirse y hace falta todavía mucha investigación sobre las múltiples aplicaciones que los cannabinoides tienen en el tratamiento de variadas enfermedades.
Si bien el cultivo de cannabis tiene muchas más aplicaciones, que les contaremos en futuros posteos, incluyendo para nuestro bienestar general y para cosmética, por ejemplo, su uso medicinal es un ámbito nuevo y extremadamente prometedor de cara al futuro, especialmente para los pacientes que se beneficiarán con el uso de los derivados de esta planta tan especial y generosa. En YVY, asumimos con responsabilidad y esperanza el desafío de acercar soluciones naturales, probadas y sustentables a quienes más las precisan.